Expresando...
A veces en comunicación silenciosa, en comunión con todo lo que te encuentres, saludando al sol al ama-nacer, aunque no lo veas, al ocaso, a la noche... agradeciendo lo acontecido en el día, cada día que se fue, agradecer el descanso y el nuevo día...
Está ya bien entrada la onda del viento comunicador, canalizar la voz del espíritu, escucharse... escuchar a los otros, y es tanto silenciarnos a ratos sintiendo la propia presencia, la calma... o la tempestad en el vientre, expresarla de mil modos, comunicarse, llegar a los otros... que el mensaje llegue...
Con tanta actividad externa, a veces los días no dan más de sí, pero lo importante es mantener viva la conexión con quienes nos rodean en nuestro presente, y con todos los que amamos en el corazón, sentir la conexión... Todo está inter-conectado, todo comunica algo... He leído un par de veces en algún periódico en la red, que cada 16 horas ha estado llegando un mensaje del espacio exterior, bueno... veré si lo encuentro, y si no, baste con mi palabra como testigo, hasta entonces... o... da igual, primero es la comunicación con uno mismo, a modo de verticalidad entre el cielo y la tierra, luego, expresarnos, en la medida de lo posible, desde el corazón.
"Si te encargas de que cada día tu conducta sea impecable, el día siguiente estará completamente desocupado, y estarás libre para llevar a cabo tus planes, vigila siempre no dejar ningún cabo suelto. De esta manera, cada nuevo día te encontrará libre y disponible". (Omraam Mikhaël Aïvanhov)
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